Nunca subestimes el poder de un buen calentamiento. Preparar tu cuerpo antes de entrenar no solo previene lesiones, sino que también mejora tu rendimiento. Dedica al menos 10 minutos a realizar movimientos dinámicos que activen tus músculos, como estiramientos, rotaciones articulares y trote suave. Un cuerpo bien calentado responderá mejor a las demandas del entrenamiento.
La Importancia de la Flexibilidad en tu Rutina de Entrenamiento

